Franco aparece en un pueblo de Ancares

Franquín (los muertos mandan) aparece en plasma en un pueblo de Ancares  con plenos poderes y palmeado bajo palio por una minicorte de fervientes gentes medias   dispuestas a cobijarse bajo la concha protectora de cualquier caracol -o caracola- con pretensiones (no quieren ser limacos liberados)

 protegiéndose así de los malvados vientos democráticos :gente ilustrada y con ideas tipo Cela y algunos más, pero considerada  intrusa (tienen pánico a que se les descubran, salvo excepciones,  sus vergonzosas  carencias) en ese grupo inmovilista de  posiciones ultraortodoxas "progresistas" y...  ¿abierto? ¡ja! que, con insistencia periódicamente tratan de cerrar  al mundo a  sus  sus hoy escuálidos y escocidos clientes  que se consuelan mutuamente, desde facebook , y se protegen  de las inclemencias exteriores en ese recinto  cerrado a las libertades de pensamiento e información plural.

 ¡Hijos míos, haced como yo, no os metáis en política! y...seréis salvos e inmortales por los siglos de los siglos. Como si el pueblo en cuestión no estuviera lleno de memorias politicas, como todos .

 Sí señor, en época electoral de municipales y autonómicas, cuando todo el mundo en todas partes, sobre todo redes sociales y foros varios,hablan y debaten y pronostican y salvan a las españas
... pues en una aldea de Ancares quien quiera salirse del  estrecho guión, e introducir temas políticos de rabiosa actualidad,  que se salga del grupo o mejor que no entre, antes de que lo saquen l@s novísim@s gurús alfa y vaya a ejercer la libertad de opinión a otros grupos liberales realmente abiertos y con mentes que desarrollen temas de interés sino universal o universitario, sí al menos  nacional elevado  y popular  que es de lo que adolecen tantos minigrupos cuyo destino manifiesto es la extinción a corto por no alcanzar a más ni sus guardian@s de esencias  de pacotilla ni sus -salvo honrosas excepciones-  aburrid@s y abúlic@s participantes.

 !Qué diferencia de cuando, desde la humilde aldea se presionaba con criterio a los figurones del municipio, que consideraron poderoso ese grupo de presión de cuatro aldeanos llenos de buena voluntad y que daban lecciones de buen hacer a los orgullosos "villanos"·!